A la luz del trabajo titulado: “La villa de Monforte a la luz del Catastro de Ensenada (Parte I) “Un ejemplo de capital de un Estado señorial”” de Rosa Mª Guntiñas Rodríguez, y concretamente, en lo referente al Colegio del Cardenal se da noticia de los primeros documentos que datan de enero de 1592 y hacen referencia a cinco ventas de terrenos (viñas, huertas, “leiras” o fincas) de particulares (un platero, un sastre del “Arrabal” y un vecino de “Remberde”) y de unas casas de Francisco Díaz y Francisco Rodríguez, que les habían aforado el monasterio de S. Vicente del Pino pero que “el conde de Lemos (…) en nombre de dicho señor Cardenal nos ha pedido le vendamos y el monasterio ha accedido para edificar un Colegio de la Compañía de Jesús (…) en la puente de S. Lázaro (…) en donde se va a leer gramática”.
Documentos que ponen de relieve, una vez más, que el monasterio de S. Vicente del Pino habría facilitado, como hará en el caso del Convento de las Clarisas, la construcción del Colegio. Compras que se complementan en febrero de 1593 con una donación de un terreno por parte del Concejo para que el Colegio “tuviese en la fachada y delante plaza” 190 fundándose en julio del mismo año el Colegio “cuya advocación ha de ser (…) Nuestra Señora de la Antigua” 191 lo que parece contradecir lo recogido en la Relación condal de 1741.